viernes, 12 de julio de 2013

Electricidad

  Hay más canciones en mi lista, incluso las hay banales, estúpidas también, pero algo se instaló en mi cabeza, algo que, incongruentemente, sólo se siente y no se razona, asumo que mis impulsos eléctricos perdieron un poco de frialdad y ahora se permiten sentir. Las demás sustancias en mi cerebro requieren un detonante cuando deberían actuar por si solas, rodar las activa, incluso las eleva, pero detenerse es mortal.

El movimiento constante sólo desgasta cuando se emplea para evitar reacciones desfavorables, sin embargo los impulsos eléctricos vuelven a perder esta vez, cómo suelen hacerlo ante alguien que arraigó la terquedad cómo un estilo de vida. Y sólo por nombrar un aspecto, por lo regular los comportamientos siguen un patrón, lo ecléctico rosa en lo poco práctico cuando se trata de posturas y no de estilos ¿Pero cómo hacer para que alguna vez, la frialdad del pensamiento, sea capaz de reservarse el derecho de admisión?

  Sí, es molesto saberme oscuro y sentir con una intensidad luminosa, saberme fuerte y doblar las piernas con mínimas provocaciones, saberme práctico y retroceder con las teorías; saberme ecléctico.

  Con todo lo que tengo para contar, en estos momentos, lo próximo se vuelve borroso, lo anterior inservible y lo continuo gris.

  Es sólo un fluir de pensamientos, libremente, bastante libre se torna cuando aquellos impulsos dejan fluir todo a su alrededor, como si de verdad se les haya permitido sentir, o mejor dicho, cómo si de verdad hubieran ganado una pelea con la voluntad; se siente sólo a nivel cerebral, creo que las vísceras perdieron lugar, por el momento, en este periodo, es cómo si se hubiesen acobardado (O ya tenían bastantes problemas con lo que solía comer) y dejaron experimentar a un miembro que es relativamente nuevo a la hora de depurar.

  Planes, expectativas y amor en el sentido universal, sí, acompañado de la retrospectiva de una siembra bastante ambiciosa con una cosecha bastante provechosa, SIN EMBARGO, la batalla de estos impulsos eléctricos es cómo un viento gélido que inutiliza la cosecha, esto, siendo alegórico.

Hay mucha buena y sobre todo nueva música, pero me gusta escuchar  con la que crecí, con la que aprendí, que irónicamente es la misma que me remonta a aquel momento en el que trataba de hacer eso, aprender. Si aprendí, pero lo hice a oscuras, sereno, con esos impulsos plantados donde deben estar y ejerciendo su única actividad, conducir la electricidad para que desate los procesos de los demás órganos, y hoy vuelvo a escuchar las mismas canciones, sólo que esta vez no fluyen con la electricidad, se escuchan, se sienten y se procesan, TODAS en un mismo lugar. It's a fight with my brain.